Paula Broadwell, examante del jefe de la CIA caído recientemente en desgracia, David Petraeus, rompió silencio sobre el escándalo que produjo su salida del cargo y se encuentra “devastada” por los efectos provocados, según indicó el lunes un amigo a medios estadounidenses.
Broadwell y su esposo Scott fueron tomados por las cámaras de televisión volviendo a su casa de Carolina del Norte el domingo luego de ocultarse en la casa de su hermano en la capital, Washington, desde que estalló el escándalo.
“Ella está devastada y se arrepiente profundamente por el daño hecho a su familia junto con todos los demás”, informó la cadena ABC News, citando a un amigo no identificado de los Broadwells.
Petraeus, el más celebrado líder militar de Estados Unidos en la última generación, debió dejar su cargo al frente de la CIA el 9 de noviembre luego de admitir una relación extraconyugal con Broadwell, una experta en la lucha contra el terrorismo y teniente coronel en la reserva del ejército que había sido co-autora de una biografía del general.
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