Una gala de premios no sería una gala de premios sin esos momentos
divertidos que protagonizan las celebrities. La 71º edición de los Globo
de Oro será recordada no sólo por los que consiguieron alzarse como
grandes triunfadores de la noche, sino también por un montón de
anécdotas que quedarán en el álbum de curiosidades de la historia de
estos galardones. La alfombra roja se despliega para recibir a las estrellas que se
visten con sus mejores galas para la ocasión, sin embargo, este año
sufrió un inconveniente de última hora. Una tubería de agua se rompió
inundando una parte de ella, pero los organizadores fueron de lo más
rápidos y consiguieron subsanar el problema rápidamente para que el
evento pudiera comenzar sin problemas. Eso sí, como siempre, los
fotógrafos fueron más rápidos y consiguieron inmortalizar el momento.
Como cada año, hay algunos vestidos como el que lució Jennifer Lawrence
de Christian Dior que generaron tantos comentarios, ya fueran críticas o
alabanzas, que rápidamente se convirtió en trending topic, al igual que
el original vestido de Emma Watson, que era de la misma firma y que
resultó ser tan polémico como el de su compañera de profesión. ¿Fueron
las más elegantes? ¿o pecaron de originalidad y no convencieron?. Para
originalidad, la del posado de una exultante Robin Wright, que si ya
estaba feliz por su compromiso con el también actor Ben Foster, después
de ganar el Globo de Oro por su papel en la serie House of cards, se
dejó llevar por la emoción y no dudó en ponerse el premio encima de la
cabeza y posar de espaldas a los fotógrafos, que se quedaron atónitos al
ver su 'posado'. El humor de las presentadoras Tina Fey y Amy Poehler volvió a ser uno
de los temas más comentados de la velada. No dejaron títere con cabeza,
pero consiguieron su objetivo, hacer reír a los que estaban allí y a
los que lo veíamos desde casa. De hecho, Poehler vivió la emoción de los
premiados en primera persona ya que consiguió alzarse como Mejor actriz
en una serie musical o comedia por su papel en Parks and Recreation. La
humorista se había bajado del escenario y estaba sentada encima de
Bono, vocalista de la banda U2, que la intentó tranquilizar haciéndole
un masaje en los hombros. Al escuchar su nombre, Amy no pudo evitar la
alegría y quiso celebrar su premio precisamente dándole un beso al
artista, provocando el aplauso de todos los presentes.
Comentarios
Publicar un comentario