El predicador de California que dijo que el mundo se iba a terminar el 21 de mayo fue llevado el martes a un asilo, donde se recupera de una embolia cerebral que sufrió en junio.
La hija de Harold Camping confirmó que su padre recientemente se mudó de un hospital a un centro de cuidados especiales de salud. Ahí será sometido a rehabilitación para volver a ganar fuerza después de la embolia cerebral que le dio el 9 de junio.
Camping, de 89 años, dijo que el fin del mundo ocurriría primero en 1994 y luego en mayo de 2011. Su imperio de la comunicación gastó millones de dólares, algunos obtenidos de donativos de sus seguidores, durante siete años en espectaculares y todo tipo de publicidad para sus predicciones de 2011 por el éxtasis espiritual de mayo y el fin del mundo en octubre.
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