Aunque las autoridades habían renunciado a abrir una investigación para saber cómo un pequeño tiburón había llegado al suelo de un vagón del metro de Nueva York, una madre de Brooklyn ha “confesado” que el escualo había sido encontrado por sus hijos en la orilla de la playa de Coney Island.
Después de convertirse el miércoles en un fenómeno en las redes sociales, el tiburón de apenas medio metro que fue encontrado en la línea N del metro de Nueva York y posteriormente fotografiado, incluso con un cigarrillo en la boca, ya ha sido “reclamado”, informó hoy el New York Post.
Alicia Vicino, organizadora de eventos, había pasado la jornada del martes en la playa de Coney Island, cercana a la parada de metro de Stillwell Avenue, con sus dos hijos y una hija del vecino, quienes encontraron varado en la orilla el animal muerto.
“Mis hijos son muy fans de los tiburones y de la Shark Week”, explicó Vicino al Post en referencia a la programación dedicada a escualos del Discovery Channel a la que algunos atribuyeron la inexplicable aparición en términos de mercadeo. “Estaban alucinados y se hicieron varias fotos con el tiburón”, añadió.
Después, un grupo de jóvenes tomaron el tiburón, se lo llevaron y, presumiblemente, acabaron abandonándolo en el metro donde fue encontrado posteriormente.
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