Una semana después de que Lindsay Lohan abandonara una clínica de rehabilitación, de nuevo ha dado de qué hablar al dejarse ver con Max George, vocalista del grupo 'The Wanted', de fiesta en la habitación que ocupaba el cantante en el hotel Mondrian West Hollywood de Los Ángeles, de la que la artista fue desalojada a las 7 de la mañana tras las quejas de los demás huéspedes.
''Estuvieron de fiesta en la habitación del hotel durante toda la noche y la música estaba tan alta que los huéspedes empezaron a quejarse. Lindsay estaba disfrutando de la velada con Max George. Los chicos de 'The Wanted' se han estado alojando unos días en el hotel y Lindsay, quien estuvo saliendo antes con Max, se pasó la noche de fiesta con todos ellos'', comentó un testigo a un reconocido periódico estadounidense.
'Tantas fueron las quejas de los demás huéspedes, que los empleados del hotel tuvieron que poner fin a la fiesta y echar a Lindsay del hotel a las 7 de la mañana. La gente que pudo ver a la actriz salir del hotel dijo que tenía un aspecto espantoso, como si le hubiera pasado un camión por encima'', agregó la fuente.
Tras esta noticia, el portavoz de la cantante se ha dedicado a desmentir estas acusaciones: ''Es cierto que Lindsay visitó a su gran amigo Max George, pero las demás historias sobre su visita son completamente falsas''.
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