SEGUIRE CONTANDO HISTORIAS.


Eran otros tiempos y los años 70 presentaban todos los sábados a la 1:00 de la tarde un programa producido por Freddy Ginebra y Héctor Herrera. Allí se daban a conocer algunos nóveles artistas. Charytín, Fausto y Sonia eran tres de ellos. Rápidamente calaron en el gusto de la juventud, de la clase media, sobre todo. “Gente”, trasmitido a través de Radio Télevisión Dominicana (RTVD), tenía un público cautivo.

Con Sonia comencé a establecer una amistad en la planificación de “7 Días con el Pueblo”.

También llegué a ser un fanático de su LP grabado por Karen en Argentina, que incluía la canción ganadora del IV Festival de la Canción, “Dónde podré gritarte que te quiero”, de Leonor Porcella de Brea, “Qué será de mi” y la que el pueblo bautizó como El Arañazo (Si pienso en nuestras canciones), que la catapultó a la popularidad. Y así continuaron los 80.

En una noche en la cual se celebraba el cumpleaños del amigo Pelly Guzmán, que amenizaban Juan Luis Guerra y Sergio Vargas, me senté en los escalones de la Quinta San Angel, con mi clásico cuba libre junto a la Silvestre. Le dije que si se atrevía a grabar conmigo un LP. Me dijo que sí, que conmigo ella podía discutir, pelear y mandarnos a la mierda los dos.

La suerte toca una vez, y para volver pueden pasar años.

Tocó para los dos, para ella al grabar y para mí al grabarla.

“El Terror”, Luis Días, se encontraba allí y aceptó raudo y veloz componer para “La peligrosa”.

Me llamó a las 5:30 de la mañana y me cantó lo que había compuesto. Me fascinó el estribillo y la melodía de la canción. “Luis ve donde Manuel Tejada, despiértalo y dile que es para mí”. Así nació “Yo quiero andar” y por ahí todos los otros. Los desayunos exquisitos con salmón ahumado y mimosa, después de la agotadora jornada de más de veinte shows en todo New York, junto a Jorge Taveras, me llevan a afirmar que Sonia es un caballo trabajando .

Ha dicho en más de una oportunidad que todavía come con esa producción. Los tres aprovechamos la baraja de la suerte, y junto a Manuel, la química funcionó. Sonia es como el vino, mientras más añejo mejor…

Comentarios