A mi regreso de Chile volví a contactarme con Ramón Leonardo a quien conocí en los años en que tomaba parte de los cursillos de vida.
Tenía la inquietud de que pudiésemos trabajar juntos en un proyecto musical que respondiera a la necesidad del momento.
Venía cargado de las ideas de la nueva canción que conocí en las famosas Peñas chilenas. De ahí nació Expresión Joven.
Una bujía inspiradora fue Chico González (desaparecido). Logramos conseguir a Puro Eduardo López, quien recién salía como uno de los finalistas del Festival de la Voz en 1971. El cuarteto se completó con Manuel de Jesús.
Con una disposición clara y bien definida este grupo logró posicionarse en lugares importantes en poco tiempo.
La nueva canción y la decidida lucha a favor de la libertad de los presos políticos, prendió y prontamente en Canadá, Estados Unidos y Puerto Rico fueron presentadas esas canciones, y junto a ellas la mezcla de música y declamación de "Hay un país en el mundo", del poeta nacional Pedro Mir.
En ese primer viaje fuimos invitados a cantarles a un sindicato de mineros a dos o tres horas de la ciudad de Toronto.
Cuál sería nuestra sorpresa al encontrarnos un paisaje gris y misterioso, en un país donde el verde, los ríos y los animales abundan por doquier.
Hoy vemos la situación de Cotuí y tenemos que recordar necesariamente a esta zona del Canadá. Ciertamente la mina debe ser explotada, ¿pero a cambio de qué?.
El contrato con la Barrick Gold ha sido cambiado en varias oportunidades, y todas estas en favor de dicha compañía.
Aumentando la supuesta inversión que ella haría y después de sacarle los primeros beneficios, lógicamente serían para ella.
Y entonces, el paisaje sería violentamente trasformado, ingresaríamos a la desolación de un país en exterminio.
Realmente junto a Expresión Joven conocimos muchas gentes y lugares. Personalmente he visitado más de 60 países pero esa parte nos marcó para siempre. Cotuí puede ser transformada con mucha facilidad en un infierno de Dominicana.
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