Los dos actores de Hollywood han mantenido siempre una gran amistad, y ayer lo demostraron con una animada cena en un restaurante italiano a las afueras de Londres. Mientras George disfrutaba de un plato de pasta con marisco acompañado de unos gin tonics, Brad esperaba pacientemente su comida mientras saboreaba un Martini.
"Se comportaron de forma tan educada con la camarera que no parecían actores famosos. Estuvieron muy relajados, charlando y riendo como unos clientes más", reveló un testigo al portal E! Online.
La elección del restaurante se entiende por la cercanía del nuevo domicilio londinense de Brad y Angelina, aunque la actriz no acudió al encuentro por estar muy ocupada con el rodaje de “Maléfica”.
Por su parte, George culmina en la capital británica un período de vacaciones que comenzó la semana pasada en el lago Como, en Italia, y al que le acompañó su actual pareja, la excampeona de lucha libre Stacy Keibler.
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